Eres la suma de todas tus decisiones. Todas
las decisiones que has tomados y las que no has tomado te han traído a donde
estas ahora. Decisiones de estudio, pareja, trabajo… que son grandes elecciones
pero sobre todo de muchas pequeñas decisiones que son las que se notan menos,
tomas cada día, pero pesan más en el conjunto (que comes, que lees, que amigos
tienes, que creencias tienes…). ¿Cómo has llegado hasta aquí?… poco a poco.
No podemos no elegir, pues
cuando aplazamos una decisión en realidad estamos eligiendo no elegir, y
entonces alguien lo hará por nosotros. Estamos eligiendo constantemente de
forma consciente o inconsciente. Por ejemplo si vas a votar
estas eligiendo, pero si no vas en realidad estas eligiendo lo que elijan los
demás. Siempre eliges, y siempre eliges en base al amor o el
temor, todas las elecciones se reducen a esto.
Para tomar buenas decisiones deben respetar
tus valores. Ellos te guiarán a la hora de decidir. Son tu brújula para que
no te pierdas. Tus valores es lo que es importante para ti, y son cambiantes
con el tiempo. Cuando decidas analiza si la decisión cuadra con tus valores.
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